domingo, 17 de julio de 2011

Wangnífico

2º 8ª y 10ª
Marcelo
1
Coton
5
Julian
4
Roal
2
Tibaudubin
2
Messer
6
Duran
3
Tincho
6
Szwblabla
5


2º 9ª
Gaspar
4
Leandro
3
Wang
9.999
Chino naranja
10
Rudnik
6
Leiton
5
Waisman
8
Fau
5
Gato
Ni idea


Bella y peronista mañana de sábado. Hace cuanto que no me sentaba al lado de la cancha. Comienza el torneo para segundo año, casi nuevo en este ambiente. Suerte muchachos, ojalá nos deleiten. El primer partido del campeonato se disputa entra la novena y la octava y décima que juegan juntos porque dos cabezas piensan mejor que una (o no?).

Arranca el encuentro con un pelotazo desde la cancha de la novena, mal defendido por la octava y décima y Tincho la manda al lateral. Se hace de fuerza la 810 e intenta con Rudnik pero un mal pase la desperdicia. Bien atento el chino de botines naranjas. Mientras tanto, Wang planeaba la dominación mundial desde el área chica. La novena no encuentra coordinación y apenas pasan mitad de cancha la 810 recupera y sale con la contra pero Tincho y Szwblabla no se conectan psico-mentalmente.
En eso noto una bipolaridad en la defensa de la novena. El chino con botines naranjas es un animal, traba todo y Fau no puede con él. Mientras tanto, Wang sigue planeando la dominación mundial (se ve que es larga).
La 810 se planteó un buen juego de contras, tienen una muy buena defensa y la novena deja muchos espacios en mitad de cancha y no pasa un minuto que Rudnik aparece por la derecha pero el chino de botines anaranjados le corta y sale la contra con Waisman pero es malísimo el pibe y desperdicia la jugada tirándola muy larga. Saque de arco para la novena y ya me estoy durmiendo. Pero graciadio’ y para la sorpresa de muchos Rudnik le puse un buen pase a Fau que resuelve inteligentemente y nada puede Marcelo, que no se agachó, y es el 1 a 0 para la novena. Es un bajón anímico para las dos divisiones que venían jugando bien, CON LA MENTE EN EL JUEGO.
Y automáticamente se ve reflejado, Cotón quiere salir jugando pero de lo chiquito que es lo traban y lo putean. Pero el equipo no se cansa y sale a buscarlo. En eso se da una situación particular. Szwblabla es bastante malo y cuando la defensa espera un amague este camina para adelante y pasa. Un genio. Igual Rudnik corta porque no es ningún boludo.
“El 10 puede ser mi viejo” Dice Rapidazo con respecto a Rudnik y a su peculiar barba.
La defensa de la octava y décima es una coordinación de muertos con Julián a la cabeza. Igual esta situación no molesta al resto del equipo que, aunque bajoneado, busca por arriba e intenta y aunque encuentra a un Gaspar seguro logra seguidamente un corner. Pelotazo fuerte, Gaspar se resbala pero nadie llega a tocarla y se va larga la bola.
El partido se pone interesante y Waisman se encarga de abrir juego pero está rodeado de unos pequeños inoperantes que no lo acompañan. Sin embargo están tranquilos con el resultado, saben que la 810 no va a llegar nunca porque está nerviosa y lo demuestra Cotón que tobillo que ve, tobillo que intenta quebrar. Otra situación interesante y para recalcar que he notado en el partido es que Rudnik no sabe hacer los laterales y el insuficiente mental del árbitro lo deja. (Así no va a aprender nunca. ¿Cuándo tu hijo hace pis en los muebles le sacudís el choto?).
Obviando el comentario, Rudnik sigue siendo elemental en el partido y lo va a demostrar. Toma la pelota, traba bien y de afuera pone un bello pelotazo al segundo palo, nada para hacer para Marcelo “tengo dos estacas en los pies” y amplía la diferencia. 2 a 0 para la novena y no parece que esto pueda cambiar, pero queda tiempo. Y si parecía decaída la octava hasta ahora, no se imaginan lo que fue después del segundo gol: una lágrina: Durán intenta coordinar con Messer pero es imposible, es un tronco.
Tampoco, igual, es cuestión de generalizar. Szwalgo, aprovechando su físico y como si hubiera aprendido en fuerte apache a jugar al fútbol entra empujando al área y se encuentra con el chino con botines amarillos que parece “el Jackie Chan holandés” logra arrebatársela y sacarla del área pero recupera la octava que se levanta los ánimos y vuelve a conseguir otro corner más. Igual en el corner no hicieron nada pero lo importante es que le pusieron huevo (já já).
Ahora, en este momento del partido de meditación, logro preguntarme si realmente Wang sabe que está jugando al fútbol.
Ahora sí, si pensaba que el balonpie no traía sorpresas, está equivocado. Tincho recibe un pase al estilo el “Negro” Henrique pero nada que ver y con una gran jugada individual se encuentra frente a Gaspar; le da fuerte al medio y nada para hacer por parte del arquero y descuenta la octava y décima que aprovechó que la novena pensó que este partido era un trámite (admito que yo también pensé que lo era) y puso el 2 a 1 parcial, a poco de terminar la primer etapa.

Arranca entonces el segundo y por si les quedaba dudas, el partido es de la novena. Inclinado a su favor y con el control del balón. Para colmo el referí está pintado, un banana. Pero para la felicidad del pueblo (y mía, básicamente) llegó Sebastián.
Por el otro bando, la 810 está incierta, perdida pero no se cansan y Tincho presiona a Gaspar que tiene que reventar para sacarse el peligro de encima y lo hace bien. Jugada seguida, de mala leche va mal Leandro y bien cobrado por el árbitro pero no comparto en que no le haya mostrado la cartulina colorada. Desde afuera piden 10 fechas para el defensor de la novena.
Chiflenle al Ranking rústico: centro desde el lateral para Messer y este en un intento de patada descendente le da al aire pero lejos de la pelota. Una cosa extraña, ni si quiere graciosa. Y ya nada te da gracia, es un embole el partido: la octava no coordina medio pase y la novena se tiró atrás con Tincho jugando de 2. ¡Ranking rústico, no te vayas! Pelotazo desde lejos, le llega a Wang y le pifia asquerosamente. El arquero estaba atento pero era un casi-gol para la octava y el empate pero la novena sabe aprovechar hasta las pifiadas de Wang y sale en contra con Rudnik que le da fuerte y se va por arriba del travesaño.
Ahora hay como un espacio que no se qué pasó porque llegó la milanesa. Igual no hay nada que escribir, no se preocupen.

“¡¿Qué importa la contra? Estamos perdiendo. ¡Hay que hacer un gol!” Szwalgo. Denle a este hombre los diez mil dólares.

Julián no quería ser menos que Wang y pifia un pase atrás y deja solo a Fau con el arquero que sabe resolver bien. Amigo de la casa, Julián, no pasa naranja. Igual está complicado, Waisman está hecho una máquina. Encima Leandro le pone un lindo pase a Fau pero se queda como esperando a que se la saquen y obviamente la pierde.
Ya el partido a esta altura perdió el sentido. Habré visto veinte mil contras de los dos equipos que no terminaron en nada excepto en la cual consigue la novena un lindo tiro libre que efectuaría Waisman. Le da fuerte y después de una gran carambola Messer la saca en la línea y para eliminar el peligro, Wang tira una patada onda Kung-Fu y no sé cómo no mató a nadie.
Leandro se muestra nervioso, impreciso porque es malísimo.
Queda poco, y Leiton aparece por primera vez en el partido, queda solo y la tira cerca del palo. Igual ya no había mucho para hacer. Se termina el encuentro y es para la novena. 2 a 1 arriba.

Cernadas dixit: “Son unos chotos” (la octava y décima)


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